
Para mi gordito, para él si. Tantas cosas por agradecer tengo. Todo lo que hizo por mí, y lo que logró en mí. Tanto como que llegue a amarlo inmensamente, y a sentir que esta historia nunca va a tener fin. Espero que así lo sea, ya que sé muy bien que sin él, no soy nada. Forma parte de mí, de lo que pienso y hago. Digamos que es más que mi media naranja, es mi naranja entera. Es quien me hace ver todo de una forma especial, y me hace creer en que todo puede mejorar. Es quien me levanta de cada tropezón, y me cuida para no volver a tropezar en lo mismo. Se transformo en mi ángel de la guarda, por así decirlo. Es a quien amo con locura, es por quien me levanto cada día con una sonrisa de oreja a oreja. Quien va a ser papá de mis hijitos y mi futuro marido. Por que sé que en el mundo entero, nadie, nadie sería capaz de ser lo que él es. Una persona hermosa, por dentro y fuera. Que llego a amarme a pesar de que mi cabeza es un lío. Amo a esta persona, infinitamente.
Te amo, Leandro Exequiel Nuñez (L)
No hay comentarios:
Publicar un comentario